Jorge es un padre presente. Capaz de cruzar el Atlántico para estar junto al más famoso de sus hijos, tampoco descuida a sus otros tres herederos. Tierno a pesar de su estampa de recio zaguero en pantalones cortos, ahora está en Madrid junto a Gonzalo. Atiende el teléfono y habilita a Pipita, Higuaín, el goleador de Real Madrid, el número (9) puesto en cada convocatoria a la Selección Argentina. Anochece en la capital española, es un momento de relax en el medio de la rutina de entrenamientos del coloso merengue. “La verdad, mi viejo se porta muy bien, me siento bastante acompañado. El me aconseja mucho. No te voy a decir que no rompe un poco. Pero, bueno, tengo que reconocer que soy medio cabezón, me dicen las cosas, a veces me cierro. Sé que tengo que escuchar. Por algo jugó 20 años al fútbol, no va a ir en contra de mis objetivos”, le cuenta a este medio.
-¿Y cómo hacés para no creértela, teniendo en cuenta que tenés 22 años y sos el goleador del Real Madrid y de la Selección?
-Todo lo que pasé, lo que viví, irme de mi país tan joven, fue muy rápido. Por suerte, siempre tuve a la familia y a mis amigos cerca. Eso es un poco lo que me hizo mantener los pies en la tierra. Así como te digo que soy cabezón, también tengo fuerza y convencimiento. Pasé algunos momentos difíciles, pero estos años me hicieron crecer, maduré.
-¿Por eso estás atravesando este fenomenal momento?
-Gracias a Dios, me están saliendo bien las cosas. Estamos primeros, el equipo es nuevo y disfruto mucho poder convertir.
Este dulce atacante que nació en Brest, Francia, nunca dudó, tal cual jura y perjura, en vestir la camiseta celeste y blanca. La semana pasada marcó un gol y medio en la Champions League -el árbitro se lo dio al defensor del Ajax, Anita, en quien rebotó la pelota tras un remate suyo- y el martes fabricó otro en la goleada ante Español de Barcelona. “Un delantero siempre tiene que ayudar con el gol. A fin de cuentas, de eso vivimos. Y el entrenador nuevo (Mourinho) nos pide que los delanteros seamos los primeros defensores, para que los defensores puedan jugar con mayor soltura”, puntualiza.
-Estás de racha en el Real Madrid, hiciste uno ante España en el último amistoso con la Selección y fuiste el goleador argentino en el Mundial. ¿Llevás la cuenta?
-No, la verdad que no. Por suerte metí varios goles. Hice cuatro en el Mundial.
-Metiste seis en la Selección. Te faltan unos cuantos para alcanzar a Batistuta...
-Ja, ja. Ojalá pueda alcanzar a Batistuta. Tengo mucho tiempo. Soy joven y todavía me falta aprender cosas.
-¿Sentís que sos un indiscutido?
-Me siento un jugador más, que trata de ayudar a su país cada vez que le toca jugar. Es una linda noticia saber que uno es apreciado por la gente y valorado por el periodismo. Pero nadie te regala nada. Todas las convocatorias hay que ratificarlas en la cancha.
-¿Cómo es la convivencia en esta nueva etapa?
-El vestuario de la Selección es parecido al del Real Madrid, lleno de figuras. La convivencia es buena. Estamos felices de empezar un ciclo nuevo. Ojalá sigamos en la misma línea.
-¿Considerás que Batista tiene que seguir al frente de la Selección? Muchos jugadores apoyan su continuidad, entre ellos, Messi.
-El Checho es un técnico que tiene las cosas muy claras. Ojalá que siga con nosotros. En los partidos con Irlanda y España jugamos bien. Y tiene una buena idea futbolística. Sería bárbaro que siga, ojalá se tome esta decisión.
-¿Fue medida el amistoso con España? Se dijo que los jugadores vinieron relajados y ni siquiera estuvieron todos los titulares.
-No se puede subestimar. Enfrente estaba España y era un partido muy importante. Se trataba, nada menos, que del campeón del mundo. A la gente le gustó, los que pagaron su entrada se fueron contentos. Goleamos al mejor equipo, fue algo muy lindo.
-Hablás de la gente, ¿ya te la metiste en el bolsillo?
-Cada vez que voy a la Argentina, me siento muy querido. Ojalá ganemos un título para devolverles tanta fidelidad.

Te amo tanto chancho hermoso ♥